Una Luna Nueva en el signo de piscis, símbolo del océano cósmico, de nuestra necesidad de trascendencia, de sentirse con algo más grande (Dios, el Cosmos, La Pachamama, la energía universal, La fuente…) para romper la ilusión de la separación entre una misma y el otro, entre nosotros y el mundo.
Chiron en conjunción con esta luna nueva puede acentuar ese sentimiento de estar separado, puede hacer que despunten nuestras heridas profundas de soledad, de no pertenencia…Separación entre nuestro cuerpo y nuestra alma, inadecuación entre nuestro mundo interior compuesto por los sueños, por el imaginario y la realidad exterior que vivimos…
Chiron en la mitología es un centauro mitad hombre, mitad animal, nuestra parte instintiva algunas veces enfrentada con nuestro deseo de elevarnos, de verticalizarnos… él nos enseña que es a partir de nuestras heridas, de nuestro procesos de curación que podremos acompañar al prójimo, que es de este lugar de vulnerabilidad, sufrimiento, que desarrollaremos una compasión por el prójimo, compasión desde el corazón….
Chiron es más que una energía, es un proceso chamánico de vida, de travesía entre mundos para unificarse, convertirse en uno mismo, auténtica y verdaderamente….
Esta Luna Nueva es realmente fuerte pues ella nos habla del misterio de la vida que nos habita, que nos confronta a la mayoría de nosotros ante una búsqueda de sentido, de veracidad, con la finalidad de poder reconectar con el mundo y participar de la sinfonía cósmica en un tono justo.
Ya que frecuentemente en el signo de piscis o bajo la influencia de Neptuno nosotros deseamos sacrificar nuestra individualidad, disolviéndonos y así perdiéndonos en un mundo imaginario, de fantasía, de adicciones, en busca de un lugar más allá….
Esta Luna Nueva nos trabaja en profundidad pues ella nos toca en tanto que humanos en nuestro sentimiento de existir, haber encarnado… en los misterios de la vida, de llegar al mundo en un momento y después reunirnos con la Fuente (u otros espacios según nuestras creencias)
Esta luna está también marcada por las retrogradaciones de Saturno (el 2 de marzo en escorpio) que nos invita a ser honestos con nosotros mismos, para atrevernos a observar ahí donde mentimos o puede que hasta donde hagamos trampas en nuestras relaciones con el prójimo; y Marte (el 1ro de marzo en Balance) que nos pide que pongamos atención al uso de la fuerza, a la cólera en nuestras relaciones con el otro: hacemos que vuelva a nosotros mismos?
En fin Júpiter directo el 6 de marzo nos abre las puertas después de un tiempo de retiro interior en conexión con nuestras raíces, nuestro sentimiento de pertenencia…
Para quienes resuenan con Chiron, arquetipo del terapeuta herido, no duden en contactarme para ver dónde él resuena en vuestro tema…